El autocuidado implica el compromiso de cuidar tanto el cuerpo como la mente, y es fundamental para lograr salud física y mental. Se recomienda una buena alimentación, un descanso adecuado de 9 a 10 horas, mantener la higiene y dedicar tiempo a actividades recreativas para mejorar el bienestar general. Estas prácticas ayudan a evitar problemas de salud y contribuyen a un estado emocional positivo.