Las técnicas artesanales tradicionales varían entre regiones y utilizan materiales propios de cada lugar. Sin embargo, la globalización amenaza estas tradiciones al hacer que la producción industrial sea más barata. Para preservar las artesanías, es importante transmitir los conocimientos a nuevas generaciones, crear mercados para los productos artesanales, y proteger los recursos naturales y derechos de propiedad intelectual de las comunidades.