Este documento establece las orientaciones para integrar la educación en valores de forma transversal en todas las áreas del currículo escolar. Propone trabajar valores como la igualdad, la resolución pacífica de conflictos, el deporte, la convivencia, el medio ambiente y la sostenibilidad a través de objetivos graduales según la edad de los estudiantes. También destaca la importancia de la comunicación entre la escuela y las familias para reforzar estos valores.