El documento aborda el calentamiento global y la falta de consenso internacional para abordar el cambio climático, destacando la evidencia científica y los eventos clave en la política ambiental desde 1972. A pesar de acuerdos como el Protocolo de Kioto, los intereses nacionales y presiones de diversos actores, como los países en desarrollo y la OPEP, dificultan las negociaciones. Finalmente, concluye que los intereses económicos a menudo priman sobre las necesidades globales, lo que ha llevado a la postergación de acuerdos efectivos.