La Edad Media en Cantabria abarcó desde el siglo V al XV. Cantabria jugó un papel importante junto con Asturias al resistir la invasión musulmana. En el siglo XII, las Cuatro Villas de la Costa consiguieron sus fueros. La región albergó notables edificios y arte mozárabe, románico y gótico, incluyendo monasterios e iglesias como Santo Toribio de Liébana. El Camino de Santiago también pasaba por Cantabria.