El documento presenta una estrategia para promover el aprendizaje informal en las organizaciones, destacando su importancia frente al aprendizaje formal. Se identifica la necesidad de cambiar modelos mentales sobre la formación y se proponen intervenciones que faciliten espacios de interacción y diálogo entre profesionales, así como el rol de directivos como coaches. Además, se sugieren categorías de intervención organizativa para sistematizar y fomentar el aprendizaje informal de manera efectiva.