Mario Andrade reflexiona sobre el valioso tiempo que queda en la vida a medida que envejecemos. Ahora que se da cuenta que le queda menos tiempo del que ya ha vivido, quiere aprovechar cada momento de la mejor manera. No desea perder el tiempo con reuniones innecesarias, personas absurdas o mediocridades. Busca pasar el tiempo que le queda rodeado de gente humane y sincera que aprecie lo esencial en la vida.