El éxito se define no por la cantidad de logros, sino por el esfuerzo y la capacidad de superar obstáculos, destacando la importancia de la actitud y el liderazgo. El empaque es crucial en la estrategia de comercialización y debe considerarse como parte integral del producto, afectando tanto la competitividad como la productividad. Se deben abordar factores como el conocimiento del producto, los riesgos durante su distribución y los estándares legales para optimizar los sistemas de empacado.