El documento presenta una introducción a diferentes corrientes éticas en la filosofía griega y moderna. En la antigua Grecia, Aristóteles defendió que la felicidad es el resultado de la virtud y la prudencia, mientras que los epicúreos defendieron que el placer es el bien supremo. En la modernidad, Kant estableció una ética formal basada en el deber y la razón práctica, mientras que en la actualidad surgen las éticas aplicadas para abordar problemas sociales concretos.