El documento presenta una lección bíblica sobre el cuarto mandamiento de guardar el día del Señor. Explica que el domingo es el día de descanso cristiano en honor a la resurrección de Cristo. Se debe dedicar este día a la oración, alabanzas a Dios, y hacer el bien. El mandamiento requiere consagrar todo el tiempo a Dios, especialmente un día a la semana absteniéndose de actividades mundanas.