Este documento presenta las opiniones de un profesor de historia sobre la reciente reforma educativa en Chile que redujo las horas de historia. El profesor argumenta que (1) los cambios cuantitativos como aumentar horas no mejoran necesariamente la calidad de la enseñanza, (2) se necesitan reformas cualitativas en la formación de profesores y en las aulas para fomentar un pensamiento crítico, y (3) tanto los profesores como las universidades deben reconocer sus propias deficiencias para impulsar un verdadero