Este proyecto buscó fortalecer la capacidad de adaptación al cambio climático de familias, organizaciones y gobiernos locales en la sierra sur de Perú. Identificó prácticas adaptativas locales y fortaleció ONGDs, municipios y comunidades para incorporar la gestión de riesgos climáticos en sus planes y proyectos. Además, promovió el intercambio de conocimientos entre actores a nivel regional para enfrentar de manera coordinada los impactos del cambio climático.