La resistencia a la compresión del concreto es la medida más común utilizada por los ingenieros para diseñar estructuras. Se determina mediante pruebas destructivas en cilindros de concreto curados de manera estándar, y los resultados se usan para asegurar que el concreto suministrado cumpla con los requerimientos del proyecto. Los procedimientos para elaborar, curar y probar los cilindros deben seguir las normas ASTM para obtener resultados precisos. La resistencia promedio de varias pruebas debe superar la