Este documento define la prueba como el proceso mediante el cual las partes intentan demostrar los hechos presentados en un caso ante un juez. Explica que los objetos de la prueba son los hechos y no afirmaciones, y que ciertos hechos como los admitidos, presumidos o notorios no requieren prueba. También establece que el juez conoce el derecho nacional pero que el derecho extranjero debe ser probado, aunque el juez tiene la obligación de aplicarlo.