El documento describe la escultura del período manierista en Italia en el siglo XVI, liderada por Miguel Ángel. Se caracterizó por composiciones más grandiosas y menos atención al detalle. Miguel Ángel se opuso a la rigidez clásica y buscó mayor libertad creativa, tensión frente a equilibrio, y movimiento frente a estatismo. Algunas de sus obras más importantes fueron la Piedad, el Moisés, y las tumbas de los Médici en Florencia.